Esta mañana me he levantado filosófica y mientras me preparaba el desayuno he ido enumerando mentalmente una serie de preguntas a las que por más que lo intento no consigo responder de forma coherente. Allá van; a ver si me podéis iluminar.
1: ¿Por qué para preparar una oposición pública sólo se puede recurrir a preparación en academias privadas o por libre? No veo lógico hacer la carrera de magisterio y al terminar tener que apuntarse a una academia privada que no es más que un sacacuartos para tener cierta ¿seguridad? a la hora de opositar. Ya que hay tanta carrera y tanto máster ¿por qué no se prepara desde ahí a una oposición que es pública?
2: ¿Por qué quienes van de tolerantes dejan de serlo cuando se les lleva la contraria? ¿No es un tanto incoherente? En las noticias esta mañana hablaban de piquetes informativos que se dedicaban a poner silicona (como menor de las putadas) en las cerraduras de bancos u otros negocios. Y digo yo, si a mí me da la real gana de trabajar y no hacer huelga, ¿acaso no estoy en mi derecho? Lo mismo que quien quiere la hace, quien no quiere no tendría que ser coaccionado a no hacerla. Es de lo más absurdo.
3: ¿Por qué hay gente que no hace otra cosa en la vida más que quejarse y quejarse en vez de tener huevos e intentar hacer algo diferente con su vida? Estoy harta de ver que la gente quiere poder pagar su hipoteca, su casa en la playa, sus vacaciones en el Caribe y su coche recién salido del concesionario. A ver, hijo de mi vida, si aprendieras a vivir con lo que tienes, ¿no serías más feliz? Pues se ve que no, que en esta sociedad consumista de M.... o tienes de todo o por lo visto dejas de ser persona.
4: ¿Por qué hay padres que tienen hijos que no paran de quejarse de ellos? Si no querías niños, ¡no haberlos tenido! Que yo sepa, tener un hijo es una responsabilidad de por vida que en primer lugar es de los padres y no es la escuela. Harta estoy de ver pobres niños de tres añitos que los dejan en un aula matinal a las 7.30 de la mañana, que comen a medio día en el colegio, que después tienen extraescolares y hasta las 7 de la tarde no ven a sus padres. Y después, lo mejor de todo, es que los padres se quejan de que los niños no les hacen caso. Pero a ver, si no te conoce, ¿cómo esperas que te haga caso?
5: ¿Por qué la culpa de absolutamente todo la tienen los demás? Supongo que por aquello de ver la paja en el ojo del otro y no la viga en el nuestro (o algo así...). ¿La culpa de crisis? De Zapatero (mía no, que yo era muy feliz ganando una millonada vendiendo casas por el triple de su valor real y ahora se me ha acabado el chollo por creerme que todala vida sería así. ¿La culpa de que mi niño no me obedezca? Del maestro, que no lo educa (porque el niño es mío, pero pasa más tiempo con el maestro así que es él quien lo tiene que educar). ¿La culpa de que yo esté en paro? De Zapatero que no crea empleo (mía no, que he echado currículums en mi pueblo y no me llaman y eso de irme a otra ciudad, uy no que igual me comen). El caso es no admitir nuestros propios errores; siempre es más fácil culpar a otros de ellos.
6: ¿Por qué no se regula de una vez la prostitución y toda la economía sumergida que hay en este país? Porque supongo que es más fácil decir que hay 5 millones de desempleados y callarse que la mitad o más hacen sus movidas en negro y ala, démosles becas a sus hijos. Igual es que las inspecciones de trabajo son muy caras y no hay personal suficiente o yo, que igual soy muy malpensada y el trabajo en negro no existe.
7: ¿Por qué vale dinero la formación? Si tanto se llena la boca con eso de que hay que formarse, ¿por qué no se dan ayudas reales a quienes quieren hacerlo y no pueden por falta de presupuesto? ¿por qué no se mira mejor a quién se les da beca y a quién no? Quizás yo no sepa mucho de matemáticas, pero un dentista con su consulta privada que declare un 10% de su ganancia real recibe todas las becas del mundo para sus hijos. En cambio, un funcionario que cobre 800 euros no recibe nada porque ¡es funcionario! ¿No es un poco absurdo?
8: ¿Por qué nos obstinamos en creernos todo lo que dice la caja tonta y no pensamos por nosotros mismos? Quizás sea más fácil engañarse y pensar que uy, "la tele lo sabe todo" y así encontrar una razón más para pasar por la vida sin darnos cuenta de lo que realmente ocurre a nuestro alrededor. ¿No decía alguien que "la felicidad está en la ignorancia"? ¡Pues toma ya!
En fin, que creo que por tiempo que pase, seguiré sin entender las cosas raras que pasan a mi alrededor...